Para los noventas el rock gótico se encontraba dentro de la lista de supervivientes de lo hecho en los 80s. El terreno estaba dominado por el rock alternativo y las superestrellas del rock estaban estafando a miles de personas en sus giras, seres reducidos y sin contenido en la cabeza eran presentados como sabios, caso especial de Kurt Cobain que siendo un mediocre don nadie era vitoreado por las juventudes, presentado como un gurú, como un guía. Ese proyecto de artistas prefabricados fracasó de tal forma que su guía espiritual se suicidó o lo asesinaron, Axl Rose hoy es un vejestorio que genera lástima con tan sólo verlo, y los demás dejaron de ser músicos para convertirse en productos, hoy viven de vender su imagen para anuncios, de promocionar guitarras y de formar grupos de poca calidad que no duran más de 5 años y no aportan nada diferente a la dinámica del sonido. Ellos tienen sus millones y los escuchas tienen su estafa. 

En los 90s el gótico era presentado como una moda, pero una especie de moda del rock subterráneo. Incluso se corrió la voz de que London After Midnight negaban pertenecer a ese género no por un principio artístico sino porque reconocerse como una banda de gótico cerraba puertas a disqueras, a presentaciones en directo, a entrevistas, etc. El gótico tenía el estigma de Rozz Williams, eran vistos como suicidas potenciales que jugaban mucho con la sexualidad, el fetichismo, lo aberrante; resumiendo, no eran bien vistos por la ortodoxia. No eran como unos KISS que podían tener a sus groupies y sus excesos pero que al momento de hacer su trabajo sabían hacer dinero a raudales adaptándose sin queja a la dinámica de ventas, posar para la foto, disfrutar de seguidores estúpidos. En cambio, los góticos eran vistos como gente inestable y conflictiva.  

Así era el terreno en que apareció Sanguis Et Cinis, banda austriaca que fue de las pioneras en el estilo que mezcla el gótico con el metal y tintes industriales. Este, su primer disco (puedes descargarlo desde este enlace), se publicó en 1996, se trata de un estilo de rock gótico lúgubre con matices románticos donde la muerte y el fatalismo son temas que ocupan lugar en las letras, es un disco bien hecho. 

El grupo ha desaparecido ya, duraron pocos años pero actualmente se les recuerda como uno de los pilares del gótico noventero. 

EXPENTANCY: Gothic Rock, Dark Wave, Metal

FELLOW: Screams For Tina, Rosetta Stone, Nosferatu